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Hoy terminamos la serie en que analizamos las 20 tramas maestras que propuso Ronald Tobias. Ya vimos las dieciocho primeras tramas de búsqueda, aventuras, persecución, rescate, huida, venganza, enigma, rivalidad, el desvalido, la tentación, la metamorfosis, la transformación, la maduración, el amor, el amor prohibido, sacrificio y descubrimiento, el precio del exceso y terminamos con las tramas de ascenso y caída de las que ya vimos la primera parte.
Pero antes recordaros que en la plataforma de cursosdeguion.com podéis aprender todo lo necesario para escribir guiones y convertiros en guionistas. Tenemos cursos que enseñan a escribir cortos, largos, series, webseries, documentales, cómics… 70 cursos a día de hoy y cada semana salen clases nuevas.
Hoy continuamos el curso de Dosier de largometraje. En este curso vemos los diferentes tipos de documentos que podemos hacer para vender un largometraje dependiendo del estado en que esté. Esta semana tenemos un caso de estudio con ejemplos que os podréis descargar. Una película que se estrenó en cines y tuvo tres nominaciones a los Goya: Explota explota. Veremos los dossiers de venta que se hicieron en las diferentes etapas para vender el proyecto y buscar financiación. Va a ser muy instructivo.
Y la suscripción también te da acceso a la comunidad de guionistas que hemos creado en un servidor privado de Discord. Un lugar donde relacionarnos entre guionistas para crecer juntos. El lugar donde hay que estar.
El próximo sábado hemos quedado también para seguir desarrollando una serie en directo. Será a las 17:00 de España, que son las 12:00 en Argentina y Uruguay, las 11 en Chile o las 10:00 en México y Colombia. Estaremos en el servidor de Discord de Guiones y guionistas en la Writers´room que lleva por nombre Aula-taller.
Las tramas maestras de Roland Tobias
Continuamos con la propuesta de Ronald Tobias sobre las 20 tramas maestras de su libro El Guion y la trama. Fundamentos de la escritura dramática audiovisual.
Ya analizamos la trama de búsqueda, la trama de aventura, la trama de persecución, la trama de rescate, la trama de huida, la trama de venganza, la trama del enigma, la trama de rivalidad, la trama del desvalido, la trama de la tentación, trama de la metamorfosis, la trama de transformación, la trama de la maduración, la trama del amor, la trama del amor prohibido, trama de sacrificio, trama de descubrimiento, la trama del precio del exceso y terminamos con las tramas de ascenso y caída.
Las tramas del ascenso y caída
Y en este segundo podcast veremos el lado del fracaso. Así como la trama de ascenso examina los valores positivos del carácter humano cuando éste se halla sometido a alguna presión, la trama de la caída analiza los valores negativos de la personalidad humana. Son éstos unos relatos sombríos. Son historias de poder y de corrupción y de avaricia. El espíritu humano se viene abajo en los momentos de crisis.
Personas como Charles Foster Kane en Ciudadano Kane, Michael Corleone en la trilogía de El padrino y el rey Ricardo III en la obra de Shakespeare son todos ellos personajes fascinantes. Personajes como Elmer Gantry (en Elmer Gantry), Willy Loman (en La muerte de un viajante) y Jake La Motta poseen asimismo un gran atractivo. Los personajes de estas historias pueden cubrir un amplio espectro de la conducta humana, desde la maldad (como en el caso de Michael Corleone, aunque empecemos a sentir simpatía por él en El padrino III cuando intenta lavar sus pecados) hasta una especie de asombro (como el que provoca Charles Foster Kane, a quien no se puede caracterizar como un hombre «malvado»).
Como escritor, habrá que centrarse en aquello que podría denominarse vagamente como «la travesía de la vida», el ascenso y caída del personaje principal. Seguimos a Kane desde el momento en que, siendo un niño despreocupado, es separado de su padre y de su madre. Una vez que es rico, tiene responsabilidades. Lo vemos como un joven lleno de idealismo y energía y con el deseo de hacer del mundo un lugar mejor. Lo seguimos a través de los cambios y avatares de una vida compleja. Poco a poco se convierte en un ser amargado y desilusionado frente a lo que la vida le ha ofrecido y su falta de poder para acometer los cambios que desea realizar. Kane no es una persona corriente.
Mientras elaboramos al personaje, descubriremos que rápidamente se convierte en un ser extraordinario. El personaje central puede comenzar siendo una persona vulgar, pero los acontecimientos (o el destino, si se prefiere) hacen que se eleve sobre lo ordinario y lo vulgar. La pregunta que sirve como fundamento a la mayoría de estos relatos es simple: ¿cómo afectará la fama (o el poder, o el dinero) a este personaje? Lo vemos antes de que se produzca el cambio, durante y después de ese cambio, y comparamos las fases de desarrollo que el personaje ha experimentado como resultado de esas circunstancias. Algunos pueden sobreponerse a esas circunstancias, otros, no.
Ello no implica que el personaje principal deba sufrir un colapso moral. La tensión, como en Ciudadano Kane, es el resultado de la abismal diferencia que hay entre lo que él esperaba hacer con su vida y con su dinero y lo que realmente tiene. El esfuerzo puede ser valeroso, pero en este tipo de argumento fracasa. Y a consecuencia de ese fracaso, se produce la desilusión, la infelicidad e incluso la ruina. La enseñanza parece ser que el poseer fama (poder, dinero) no lo es todo, que no es siquiera suficiente.
Todos estos elementos (aunque no siempre) corrompen, o al menos constituyen fuerzas que superan a aquellos que las poseen. Dependiendo del mensaje que queramos dirigir al lector, hay que comprender con nitidez las implicaciones morales o sociales de la cadena de acontecimientos del relato. Si el dinero o el poder corrompen al héroe, ¿qué es lo que se dice sobre el poder y el dinero?, ¿que esas fuerzas son más poderosas que cualquiera de nosotros?
Este mensaje es particularmente poderoso si el personaje es básicamente bueno antes de obtener el poder y transformarse en una persona con valores dudosos como resultado de ese poder. Ello implicaría una clara postura sobre la corrupción de los valores a consecuencia del poder y del dinero. Se puede afirmar que estos elementos son intrínsecamente malvados ¿Es ése el mensaje que queremos que se desprenda del relato?
El efecto habitual de estas fuerzas (fama, poder, dinero) es una lucha entre el estado previo del personaje (esto es, cómo era antes de que el catalizador cambiara las cosas) y cómo es ese personaje así que se transforma en un nueva persona modelada por los acontecimientos (véase la diferencia entre esto y la trama de transformación, que comienza con el cambio). ¿Con cuánta facilidad se entrega el personaje al abuso de poder? ¿Se resiste? ¿De una forma significativa? ¿O lo acepta sin más? Hay que trabajar con tal cantidad de psicología humana en esta trama que lo mejor es tener un propósito bien definido (esto es, una idea precisa de lo que se quiere decir sobre el tema) al que dirigirse.
Mientras damos forma al personaje, hay que ser consciente de que es importante para el lector el saber y comprender las etapas de desarrollo que atraviesa el personaje. Debemos saber lo que era antes de ese gran cambio en su vida para así tener un término de comparación. Esto constituye el primer movimiento de la trama.
En el segundo movimiento, debemos experimentar el cambio que empuja al personaje desde su estado inicial a su nuevo yo. Esta puede ser una progresión gradual que dure meses e incluso años, o puede ser instantánea (un súbito golpe de buena suerte como ganar la lotería o ser elevado repentinamente a una posición de poder). Estos acontecimientos imposibilitan al personaje para poder seguir siendo el mismo.
El tercer movimiento es la culminación del personaje y de los acontecimientos. Si el personaje posee un defecto, veremos la expresión de ese defecto y cómo influye en él y en los que le rodean. El personaje puede superar ese defecto después de que algún suceso drástico le obligue a enfrentarse a sí mismo, o puede sucumbir a ese defecto. Por lo habitual (pero no siempre) alguna catástrofe y el resultado de la conducta del personaje provoca una situación que muestra en lo que se ha convertido.
Una vez más, ello depende de lo que se quiera decir sobre este personaje en medio de esta clase de circunstancias, y de lo que se quiera decir sobre la naturaleza humana. ¿Es fuerte? ¿Es débil? ¿Somos solo unos juguetes del universo? ¿O podemos dominar el destino y construir nuestro propio futuro? Si un personaje se aprovecha de otros durante su ascenso a lo más alto, a menudo deseamos ver cómo ese personaje recibe su merecido. El orgullo precedió la caída.
Preferimos ver cómo la gente arrogante sufre reveses. Pero si el espíritu humano debe superar graves dificultades, como en el caso de El hombre elefante, y ese personaje demuestra que merece conseguir su objetivo, deseamos que el personaje ascienda a un plano espiritual más elevado. Deseamos que triunfe. Pero debe mostrarnos que lo merece. Desearlo no es suficiente; tampoco merecerlo lo es; el personaje ha de ganárselo. La historia se centra en el personaje principal; los acontecimientos comienzan y acaban con él. Él debe vencer a otros en virtud de sus extraordinarios atributos (positivos o negativos).
Debe ser carismático, fuerte y fascinante. Debemos sentirnos arrastrados hacia él, sea héroe o villano. Muchos otros argumentos analizan la naturaleza humana y cómo la personalidad se ve afectada por las presiones, pero pocos lo hacen tan exhaustivamente como estos dos. Nos damos cuenta de que la vida tiene altibajos y estas tramas caracterizan estas fluctuaciones del devenir humano. Para algunas personas, los ascensos y declives de sus vidas son mucho más dramáticos que para el resto de nosotros, y esa gente extraordinaria nos atrae. No son como nosotros y, sin embargo, se nos parecen mucho. Aman y odian como nosotros, con la diferencia de que sus amores y sus odios parecen más acusados.
Los ascensos son mucho más pronunciados y las caídas mucho más dramáticas. Una vez que hayamos hallado el enfoque moral para el personaje y hayamos decidido si él ganará o perderá la lucha, veremos con mayor claridad cómo conseguir estos objetivos. A menudo se nos recomienda que debemos escribir teniendo en mente un final, aunque esto es más fácil decirlo que escribirlo. Con esta clase de tramas, sin embargo, es casi una necesidad absoluta el saber cómo se va a plasmar al personaje. El autor dramático nos hará creer que existe un defecto trágico en todos nosotros que aguarda su oportunidad para salir a la luz.
Resumen
- El peso de la historia debe recaer en un único personaje.
- Ese personaje debe poseer fuerza de voluntad, carisma y ser aparentemente único. Todos los demás personajes deben girar en torno a este protagonista.
- En lo más profundo de este relato debe haber un dilema moral. Este dilema pone a prueba el carácter del protagonista (o del antagonista) y es la base para el elemento catalizador que transforma al personaje.
- Personaje y acontecimientos deben estar relacionados estrechamente. Cualquier cosa que suceda debe estar en función del personaje principal. Este es el elemento (el personaje) que afecta a los acontecimientos, y no a la inversa. (Esto no quiere decir que los acontecimientos no afecten al personaje principal, sino que nos interesa más cómo el personaje influye en el mundo que cómo el mundo influye en él).
- Hay que mostrar cómo era el personaje antes de ese cambio trascendente que alteró su existencia, para que tengamos un elemento de comparación.
- Hay que mostrar cómo el personaje evoluciona a través de cambios sucesivos como resultado de los acontecimientos. Si es un relato acerca de un personaje que supera horribles circunstancias, mostramos la naturaleza de ese personaje mientras todavía está sufriendo esas circunstancias. Luego, cómo los acontecimientos cambian su naturaleza a lo largo de la historia. No hay que saltar de un estado del carácter del personaje a otro; esto es, mostremos cómo el personaje pasa de un estado a otro al revelarnos sus motivaciones y propósitos.
- Si el relato trata sobre el declive de un personaje, hagamos verosímil que ese declive sea una consecuencia de su carácter y no de unas circunstancias gratuitas. Las razones de una ascensión pueden ser gratuitas (el personaje gana 27 millones de dólares en la lotería), pero no así las razones de su caída. Las causas de la habilidad del personaje para superar la adversidad deben ser también una consecuencia de su personalidad, no una argucia argumental.
- Procuremos evitar un ascenso o una caída drásticamente dramáticas. Hay que cambiar las circunstancias de la vida del personaje. Creemos pequeños ascensos y caídas a lo largo del camino. No se debe colocar al personaje en la cima para despeñarlo. Cambiemos la intensidad de los acontecimientos. Puede parecer por un momento que el personaje ha superado sus defectos, cuando, de hecho, se trata de una situación efímera. Y al contrario. Después de numerosos reveses, el personaje se abre camino (como resultado de su tenacidad, valor, confianza, etc.).
- Importa mantener siempre la atención sobre el personaje principal; relacionar todos los acontecimientos y personajes con el protagonista y mostrar al personaje antes, durante y después del cambio.
Y así terminamos el podcast de hoy en el que hemos analizado las últimas tramas maestras de Ronald Tobias: las tramas del ascenso y caída. Si os ha sido útil, agradecería comentarios y valoraciones en Itunes, Ivoox, Youtube o Spotify. O que compartáis este podcast por redes sociales. Y por supuesto agradecer a los que os suscribís a los cursos de Guion o contratáis las consultorías y mentorías que ayudáis a que el podcast se mantenga. Estaremos juntos los martes y jueves con nuevas técnicas, estrategias y análisis para que aprendamos entre todos a ser mejores guionistas.